La prioridad de Lucho es lograr continuidad en Boca y que el club, en junio, le compre el pase. Pero el sueño de que Diego alguna vez lo convoque no se lo quita nadie: "¿A quién no le gustaría?", pregunta...
¿Conocés a Diego?-¿Qué Diego?-Maradona...-Me llamó cuando me lesioné la rodilla en River. Me dio apoyo, me alentó en un momento muy difícil y me puso muy contento. Ah, lo vi una vez en el vestuario de un partido de las estrellas.-¿Era la primera vez que hablabas con él?-Sí. Me llamaron al celular y me dijeron: 'Diego quiere hablar con vos'. No lo podía creer. Me dijo que no le importaban las camisetas, que le importaban las personas y que quería que me recuperara rápido. Me sirvió muchísimo escuchar el aliento de Maradona.-¿Y soñás con ser uno de sus dirigidos?-Seguro. Es el más grande y a cualquiera le gustaría, pero hay que saber que si querés estar en la Selección tenés que jugar y demostrar en tu club.Siempre bien ubicado para recibir el centro, Luciano Figueroa sabe lo que dice. Por eso, sólo atina a reírse cuando Olé le consulta si alguna vez lo tentaron con lucir su dentadura perfecta en una publicidad de pasta dental. Y como Lucho piensa cuando habla, es realista y humilde. Así, es capaz de sentirse un "burro" por haber desperdiciado un gol servido frente al Inter de Porto Alegre, y no animarse a sacar chapa con el mote de "experto cabeceador". Sin embargo, cuenta con ese espíritu guerrero que lo ayudó a sobreponerse, por ejemplo, a la muerte de su hermano Martín (en un accidente en 2001) y que ahora lo lleva a "esforzarse al máximo" y "tratar de hacer lo posible" para jugar mañana en el debut del verano frente a San Lorenzo, a pesar de sufrir fuertes dolores en los gemelos. Y ese mismo espíritu, entonces, es el que le permite ilusionarse con volver a la Selección. "¿A quién no le gustaría?", le dice el campeón olímpico en Atenas 2004 a Olé, promotor de una charla mano a mano en celeste y blanco, combinada, claro, con el verde de las sierras de Tandil.-¿Te ilusionás con volver a la Selección?-Seguro. Uno lo que sueña es hacer las cosas bien para ser visto de la Selección. Nadie va a decir que no sueña con la Selección, pero tengo como objetivo demostrar en Boca. Si no jugás en tu equipo, la Selección está muy lejos.-¿Podés ser el 9 del equipo de Maradona?-Estoy tratando de hacer las cosas bien para jugar cuando me toque y hacer lo mejor para Boca. Si se da, mejor. Y si no, a seguir trabajando. -¿Pero te tenés fe para ser el 9 de la Selección?-Sí. Uno se tiene fe, tiene muchas ganas y, como digo siempre, hay que entrenarse para que te vea desde el técnico de Boca hasta el de la Selección.-Maradona le presta mucha atención al fútbol local, ¿Te ponés como meta Sudáfrica 2010?-El sueño siempre está. Maradona mira mucho el fútbol local y eso es bueno. Sabés que si hacés las cosas bien él te está mirando, pero también hay que ser realista y saber que si no jugás, el sueño está cada vez más lejos. Ojalá pueda tener continuidad.-Y justamente hacer una pretemporada completa te puede servir...-Claro. Uno trata de hacer las cosas bien. Lo bueno es arrancar de cero y empezar a tirar para adelante.-¿Qué sentís al ponerte la camiseta de Boca?-Me siento un privilegiado. Tener este escudo en el pecho es algo muy lindo. Todo jugador quiere pasar por este club. Me siento muy bien.-¿Ya te sentís totalmente adaptado?-Me siento bien. Sé que adaptarse a Boca es difícil, de a poquito uno va conociendo más y se va conociendo más con los compañeros. Estoy muy contento.-¿Fue un volver a vivir haber llegado a Boca?-Sí, seguro. No esperaba terminar el año así y la verdad es que me puso muy contento, me tocó venir de allá, obtener el título... Nunca había salido campeón en un campeonato.-¿Y qué significó?-Uno lo que quería era venir e integrarse rápido al grupo. Desde el primer momento dije que le estaba muy agradecido a Boca por haber confiado en mí. Se hablaban cosas de mi rodilla que no me gustaban. Me sentía bien.-¿En lo grupal la obsesión es la Libertadores y en lo individual convertirte en jugador del club a partir de junio?-Sí. Vamos a tratar de darle para adelante y tratar de ponernos como objetivo la Copa, pero sin dejar de lado el campeonato, porque creo que somos un grupo grande y con muy buenos jugadores.-Uno de tus compinches en el plantel es Riquelme, ¿te considerás su amigo?-Creo que dentro de todo tenemos una amistad. Lo tuve como compañero en Villarreal, en la Seleccíon y ahora en Boca es con uno de los que estoy siempre. Me considero un buen compañero y dentro de todo un amigo.-Román dijo públicamente que sos uno de los mejores delanteros...-Que te elogie alguien como él, y un jugador de sus características, es algo que me pone muy contento. Se hace fácil jugar con él porque sabés que siempre te va a dejar solo con el arquero o te va a tirar un buen centro.-¿Y hay algún secreto para el cabezazo?-Nooo, después del gol que erré contra Internacional parece que soy un burro cabeceando, je. Trato de no tenerle miedo a la pelota, de mirarla, y de golpearla en seco. También hay que tener en cuenta el tiempo del salto.-Tu 2008 terminó a lo grande, ¿esperás que el 2009 sea igual?-Ojalá que empiece como terminó y que siga igual. Quiero rendir bien porque en junio se me termina el préstamo y mi deseo es que el club me compre. Mi objetivo es romperme todo para que Boca use la opción de compra y me pueda quedar.